El pasado jueves, 3 de agosto, se celebró la 18 reunión del Convenio Colectivo de la UNaAE, mientras los peajes rebosan de coches y los niveles de trafico alcanzan niveles de hace 10 años.
La empresa, tal y como le solicitamos CCOO y USO por carta (ver carta), rectifica su planteamiento inicial, y ha manifestado que dotará los fondos para estudios y ayudas a familiares dependientes para el año 2017 en 275.000€ y 25.000€ respectivamente sin contrapartidas. Cumplirán el convenio.
Tras un receso, CCOO hemos propuesto, con la intención de entrar de una vez por todas en materias concretas, de acordar los temas a tratar en la próxima reunión del día 17 de agosto. En este sentido, hemos planteado que fuesen salario y garantía de empleo, estando de acuerdo el resto de partes, y aceptando también la propuesta de la empresa de añadir adicionalmente el capítulo 1 del convenio (vigencia).
A partir de aquí, fin de la reunión y repetición de la anterior.
La empresa ha intentado posponer la negociación proponiendo nuevas fechas de reuniones (7 de septiembre, 31 de agosto…) evidenciando que no han entendido nada. Porque no se trata de acordar nuevas fechas, ni de poder hacer vacaciones o no. De lo que se trata, es de que no está justificado suspender una negociación que trascurridos 10 meses no ha alcanzado ningún acuerdo. De lo que se trata, es de cambiar la dinámica de no negociación en la que desde el inicio, se ha instalado la empresa. De lo que se trata, es que haya compromisos que demuestren que existe voluntad de acordar, aún con la legitimidad de tener intereses contrapuestos ambas partes.
En este sentido, CCOO se ha remitido a la propuesta de la reunión anterior: acuerdos en ultractividad que quiten la presión de una fecha límite a la mesa negociadora, acuerdos en garantía de empleo que den tranquilidad al conjunto de plantillas para que el proceso sea tranquilo y sosegado, y acuerdos en incumplimientos del actual convenio como la paga EBITDA que recobren la confianza de los trabajadores/as en la empresa. Sorprendente reacción de la empresa: “lo queréis todo”. Lo que ahora proponemos, antes era aceptado por todos.
Este es el problema de fondo: La desafección que empezamos a sentir cada vez más trabajadores con esta empresa. La que niega revertir los esfuerzos que han realizado sus empleados durante la crisis, en materia de moderación salarial, de movilidad geográfica y funcional, de flexibilidad, etc.
Mientras tráfico e ingresos incrementan a niveles de 2007 con mucho menos personal, nuestros esfuerzos vinieron para quedarse. No es de recibo, y mucho menos que perviertan el discurso, haciéndose los ofendidos tratando de irracional e inasumible nuestras propuestas. Lo ofensivo es que en una situación de abundancia como la actual, para los trabajadores no tengan ni agua.
Próxima reunión el día 17 de agosto. CCOO se queda.
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Ago 7 2017
NEGOCIACIÓN CONVENIO – RIADAS DE COCHES, Y A LOS TRABAJADORES NI AGUA
El pasado jueves, 3 de agosto, se celebró la 18 reunión del Convenio Colectivo de la UNaAE, mientras los peajes rebosan de coches y los niveles de trafico alcanzan niveles de hace 10 años.
La empresa, tal y como le solicitamos CCOO y USO por carta (ver carta), rectifica su planteamiento inicial, y ha manifestado que dotará los fondos para estudios y ayudas a familiares dependientes para el año 2017 en 275.000€ y 25.000€ respectivamente sin contrapartidas. Cumplirán el convenio.
Tras un receso, CCOO hemos propuesto, con la intención de entrar de una vez por todas en materias concretas, de acordar los temas a tratar en la próxima reunión del día 17 de agosto. En este sentido, hemos planteado que fuesen salario y garantía de empleo, estando de acuerdo el resto de partes, y aceptando también la propuesta de la empresa de añadir adicionalmente el capítulo 1 del convenio (vigencia).
A partir de aquí, fin de la reunión y repetición de la anterior.
La empresa ha intentado posponer la negociación proponiendo nuevas fechas de reuniones (7 de septiembre, 31 de agosto…) evidenciando que no han entendido nada. Porque no se trata de acordar nuevas fechas, ni de poder hacer vacaciones o no. De lo que se trata, es de que no está justificado suspender una negociación que trascurridos 10 meses no ha alcanzado ningún acuerdo. De lo que se trata, es de cambiar la dinámica de no negociación en la que desde el inicio, se ha instalado la empresa. De lo que se trata, es que haya compromisos que demuestren que existe voluntad de acordar, aún con la legitimidad de tener intereses contrapuestos ambas partes.
En este sentido, CCOO se ha remitido a la propuesta de la reunión anterior: acuerdos en ultractividad que quiten la presión de una fecha límite a la mesa negociadora, acuerdos en garantía de empleo que den tranquilidad al conjunto de plantillas para que el proceso sea tranquilo y sosegado, y acuerdos en incumplimientos del actual convenio como la paga EBITDA que recobren la confianza de los trabajadores/as en la empresa. Sorprendente reacción de la empresa: “lo queréis todo”. Lo que ahora proponemos, antes era aceptado por todos.
Este es el problema de fondo: La desafección que empezamos a sentir cada vez más trabajadores con esta empresa. La que niega revertir los esfuerzos que han realizado sus empleados durante la crisis, en materia de moderación salarial, de movilidad geográfica y funcional, de flexibilidad, etc.
Mientras tráfico e ingresos incrementan a niveles de 2007 con mucho menos personal, nuestros esfuerzos vinieron para quedarse. No es de recibo, y mucho menos que perviertan el discurso, haciéndose los ofendidos tratando de irracional e inasumible nuestras propuestas. Lo ofensivo es que en una situación de abundancia como la actual, para los trabajadores no tengan ni agua.
Próxima reunión el día 17 de agosto. CCOO se queda.
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